El papel de las certificaciones sostenibles en la competitividad de los activos inmobiliarios: Metodología BREEAM
La sostenibilidad se ha convertido en un elemento clave en el mercado inmobiliario, no solo como un compromiso ético, sino también como un factor determinante en la competitividad y rentabilidad de los activos. Entre las certificaciones sostenibles más reconocidas a nivel global, la metodología BREEAM (Building Research Establishment Environmental Assessment Method) destaca como una herramienta de referencia para evaluar, mejorar y validar la sostenibilidad de los inmuebles. Este artículo explora cómo BREEAM influye en la competitividad de los activos inmobiliarios y los beneficios que aporta a propietarios, inversores y ocupantes.
¿Qué es BREEAM?
BREEAM, desarrollado en 1990 por el Building Research Establishment (BRE) en el Reino Unido, es uno de los sistemas de certificación de sostenibilidad más antiguos y ampliamente utilizados en el mundo. Esta metodología evalúa los inmuebles en diversas áreas, incluyendo:
- Gestión: Proceso de planificación y construcción.
- Salud y bienestar: Calidad del ambiente interior, confort térmico y visual.
- Energía: Eficiencia energética y reducción de emisiones de carbono.
- Transporte: Accesibilidad y opciones de movilidad sostenible.
- Materiales: Uso de materiales con bajo impacto ambiental.
- Agua: Eficiencia en el consumo de agua.
- Residuos: Reducción y manejo sostenible de los desechos.
- Uso del suelo y ecología: Impacto en la biodiversidad y uso del terreno.
Los inmuebles reciben una calificación que va desde “Aprobado” hasta “Excepcional”, lo que permite a los interesados identificar el nivel de sostenibilidad alcanzado.
Ventajas de contar con una certificación BREEAM
Contar con una certificación BREEAM incrementa significativamente el valor de mercado de los activos. Los inmuebles certificados suelen ser percibidos como de mayor calidad y sostenibilidad, lo que los hace más atractivos para inversores y compradores. De hecho, estudios demuestran que estos edificios pueden alcanzar rentas hasta un 20% más altas que los no certificados. Además, la eficiencia energética y el manejo optimizado de recursos no solo reducen los gastos operativos a lo largo del ciclo de vida del edificio, sino que también contribuyen al ahorro mediante estrategias de gestión de residuos y uso eficiente del agua.
Otro beneficio relevante es la mejora en la reputación y el compromiso con criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza). La certificación BREEAM refuerza el compromiso de los propietarios e inversores con estos valores, un factor cada vez más importante para atraer capital en un contexto en el que las decisiones de inversión priorizan la sostenibilidad. Asimismo, los ocupantes, ya sean empresas o particulares, prefieren inmuebles sostenibles que ofrezcan ambientes saludables y eficientes, lo que puede reducir el absentismo laboral y mejorar la productividad en oficinas.
Por otro lado, en muchos países, las normativas locales incentivan o exigen niveles mínimos de sostenibilidad que BREEAM puede ayudar a cumplir. Incluso, algunos gobiernos ofrecen beneficios fiscales para inmuebles con certificaciones ambientales, lo que añade un incentivo económico a la obtención de esta certificación.
El impacto de BREEAM en la competitividad
En un mercado inmobiliario cada vez más competitivo y exigente, la certificación BREEAM se ha convertido en un factor diferenciador clave. Propietarios e inversores buscan activos que no solo sean rentables, sino también resilientes frente a riesgos ambientales y alineados con las demandas de sostenibilidad de las generaciones presentes y futuras. Esto incluye la capacidad de atraer inversores institucionales, como fondos de inversión y grandes patrimonios, que muestran un interés creciente en activos certificados, al considerarlos menos riesgosos y con retornos más sostenibles. Además, los activos certificados tienen menores probabilidades de depreciarse debido a futuras normativas ambientales o cambios en las preferencias del mercado.
En el ámbito de los arrendamientos, especialmente en oficinas, los inquilinos corporativos priorizan inmuebles que cumplan con altos estándares ambientales y de bienestar para sus empleados, lo que refuerza aún más la competitividad de los edificios con certificación BREEAM.
La colaboración de UVE Valoraciones y UVE Green
En UVE Valoraciones, no solo ofrecemos valoraciones especializadas y servicios de Project Monitoring para garantizar el control y éxito de los proyectos inmobiliarios, sino que trabajamos de la mano con UVE Green (uvegreen.com) para integrar la sostenibilidad en cada etapa del ciclo de vida del activo. Esta sinergia permite a nuestros clientes optimizar sus inversiones al combinar una valoración exhaustiva con la obtención de certificaciones de sostenibilidad como BREEAM.
Nuestro equipo acompaña a promotores, inversores y propietarios desde la decisión inicial de construcción, ya sea para edificios de viviendas, oficinas, centros logísticos o incluso viviendas unifamiliares, aisladas o en promoción. Con la experiencia de UVE Green en metodologías sostenibles, garantizamos que cada proyecto cumpla con los más altos estándares ambientales y maximice su rentabilidad y atractivo en el mercado.
La metodología BREEAM se ha consolidado como una herramienta esencial para impulsar la competitividad de los activos inmobiliarios. Más allá de cumplir con criterios de sostenibilidad, su implementación genera beneficios tangibles en términos de rentabilidad, valor de mercado, ahorro de costes y atracción de usuarios finales e inversores.
Cualquier información adicional que necesitéis podéis escribirnos un email a uve@v-valoraciones.es